Hace pocos días, Microsoft nos infomaba de que la actualización a Windows 10 sería gratis para todos, pero parece que esto no significa que vayamos a adquirir una licencia por la cara de piratilla.
Los de compañía de Redmond no nos han engañado, pero sí es cierto que hace dos días omitieron detalles realmente importantes. Y es que, según parece, no habían comentado que sin embargo, esta actualización se llevará a cabo sin que el usuario pirata reciba en ningún caso una licencia oficial de Windows 10, sino que se mantendrá en la nueva versión del sistema operativo haciendo uso de una copia no permitida por Microsoft.
Lo que han explicado ahora es que, aunque actualizarán sin tener que pagar absolutamente nada, una vez estén utilizando su Windows 10 sin licencia recién actualizado, podrán acceder a la nueva Windows Store para adquirir su licencia, de la cual no sabemos cuál será el precio. De esta forma, los usuarios de Windows 10 actualizados desde copias piratas del sistema operativo podrán utilizar Windows 10, igual que hacían antes, pero con su licencia legal. Seguramente más de uno se lleve un disgusto al actualizar y creerse que es gratis.
Sin embargo, si decidimos no adquirir una licencia, tendremos molestos avisos, fondo de pantalla en negro con la clásica marca de agua «esta copia de windows no es original» y la imposibilidad de instalar actualizaciones opcionales. Sin embargo, pese a todas estas taras los usuarios piratas pueden usar el sistema en su día a día.
Aún no se ha explicado si las clásicas restricciones serán estas, como hasta ahora en todas las copias no originales de Windows o será obligatorio pasar por caja. Aunque claro, siempre habrá quien se vuelva a la versión pirata anterior o espere uno de los famosos «loaders» (que desde RDT desaprobamos totalmente)