Estamos en la época de las comunicaciones digitales y la tecnología. Y todas estas innovaciones avanzan más rápido de lo que una persona normal, con un sueldo medio, puede permitirse muchas veces. Pero, ¿y las empresas?, ¿estan siguiendo el ritmo?
La comunicación es primordial.
Hoy en día cualquier negocio que sea de cara al público sabe que es necesaria una comunicación constante con el cliente. Hasta la tienda más humilde empieza a comprender que tanto el contacto con el cliente como su posicionamiento en la red es algo primordial.
La creación de una página en redes sociales o internet da la visibilidad necesaria a cualquier negocio y un medio de contacto con posibles clientes que no lo conocerían si no. Completar esto con una cuenta en redes sociales aumenta el feedback con la gente. Ahora resulta mucho más fácil y rápido enviar un mensaje en Facebook o Twitter que ponerse en contacto con atención al cliente. Pero a esto último hay que añadirle un elemento importante, una persona que se haga cargo de ello.
Conozco el caso de una gran cadena de venta de productos informáticos que tiene una página web muy bien hecha, cuentas en redes sociales en las que van posteando novedades y eventos. Pero carecen de un o unos community manager que lo gestionen. Lo tienen automatizado con un bot que lo va colgando. Es por eso que ante cualquier duda sobre lo que cuelgan no te queda más que morir al palo y acudir a una de sus tiendas. Puede ser una vía de negocio, pero no deja de ser un motivo de descontento para el cliente.
La figura del community manager sería una punta de la triada de la comunicación digital en internet, página web, redes sociales y comunicación directa. Recalcando que, mientras no mejoren, la conversación con una máquina o bot sigue estando muy verde y puede exasperar a cualquiera. La comunicación entre personas sigue siendo más rápida y efectiva.
Seguridad y eficiencia.
Recientemente ha salido a la luz el caso de los papeles de Panamá. Y se ha sabido que una parte muy responsable de esta filtración ha sido la no actualización de diversas herramientas del negocio digital del bufete Mossack-Fonseca.
Pero actualizar tus sistemas y métodos de trabajo no solo proporciona seguridad, si no también eficiencia. Y si además trabajas con empresas subcontratadas a las que tú proporcionas las herramientas, algo muy normal en el mercado actual, aun debería ser más primordial.
Aquí en España sé de primera mano de grandes empresas que trabajan con sistemas, ya podríamos decir, anticuados. Trabajan con ordenadores virtuales con versiones antiguas, no saben lo que es la nube y a sus subcontratas les están dando PDAs de trabajo que corren sistemas operativos descatalogados casi.
En casa está muy bien tener un ordenador con un sistema operativo de hace algunos años que nos sigue funcionando para lo que necesitamos. Pero un gran negocio no puede permitirse estar atrasado con respecto al mercado de las telecomunicaciones. Debe tener las mejores herramientas y proporcionarlas también a sus trabajadores, ya que de este modo estará seguro (trabajas con tus datos y con los de tus clientes también, hay que recordarlo) y será más productivo. Sistemas operativos, servidores y programas deben llevar la ultima versión, y no por mero capricho consumista si no por seguridad.
Actualizarse es mejorar.
Ya seas un pequeño negocio o una gran multinacional conviene adaptarse al momento en el que nos encontramos. Una inversión en crear o mejorar el entramado digital de la empresa proporciona un plus de calidad, seguridad y atención.
Conviene que en muchos sitios cambien el chip y comiencen a ver que no se puede crecer viendo como el mundo avanza y tu no.
Una respuesta a «Actualiza tu negocio, mejorarás.»
¡Muy interesante el artículo.!Todos las empresas deberían darle esa importancia a saber comunicar y optimizar recursos mediante el avance de la tecnología.