El mercado de los smartwatchs se abre paso rápidamente entre los early-adopters. Tanto es así que las grandes marcas ya se han puesto a ello y no dejan escapar esta oportunidad.
El todo conectado pasa de nuestro móvil a nuestros relojes, de manera que las notificaciones pasan a nuestra muñeca para que las veamos sin tener que hacer el ya molesto movimiento de sacar nuestro teléfono. Es por esto que esta moda será una moda cara. Un ejemplo es el Apple watch de Apple que tendrá un coste de 285€ ($349), o el Moto 360 de Motorola que cuesta 205€ ($249.99), o el Samsung Gear S de Samsung con un precio de 327€ ($399.99).
El predecesor de estos productos es Pebble, que nació en Mayo de 2012 en una campaña Kickstarter. Su éxito fue tal, que la campaña supero en dos órdenes de magnitud la meta esperada y llegó a los $10,266,845 de los $100.000 esperados. Todo un éxito.
Ahora, Fastfox intenta repetir la historia. Para ello la compañía presenta una campaña crowfunding con un reloj que compite en lo que todo el resto falla: el precio. Consiguiendo reducir el producto a un precio de $7.
El producto no contiene un sistema operativo Android, no tiene bonitas imágenes ni contiene las últimas aplicaciones de moda. Fastfox cambia la funcionalidad y pasa a algo muy simple: el producto no es una pantalla de nuestro teléfono, sino que es un sensor de actividad. De esta manera es muy sencillo el registro de nuestras actividades deportivas diarias. Además, también registra nuestros descansos para mostrarnos cómo mejorar nuestra forma de dormir.
Todas estas actividades se envían por bluetooth al teléfono y es posible publicarlas mediante WeChat. Pero claro, parece que la función principal haya desaparecido y es por eso que tiene un led que avisa de notificaciones de llamadas y mensajes. Este diseño tan minimalista permite que la batería dure entre 4-6 meses y que sea resistente al agua, además de un peso casi inapreciable.
Hasta el 25 de Diciembre estará abierto este crowfunding. ¿Te animas?
